Cientos de personas han participado en Pamplona en el Domingo de Ramos, fecha en la que se conmemora la entrada de Jesús en Jerusalén. Prácticamente todas las parroquias de Navarra han salido en procesión y la más numerosa se ha celebrado hasta la Catedral, después de que el arzobispo Florencio Roselló haya bendecido las palmas y los ramos.
Como manda la tradición, este viernes -Viernes de Dolores-, la imagen de la Virgen Dolorosa de Pamplona, se trasladó desde su capilla en la iglesia de San Lorenzo hasta la Catedral, donde participará en la procesión del Viernes Santo. El anticipo de la Semana Santa pamplonesa echó a la calle a miles de vecinos que, con fervor en unos casos, y profundo respeto en otros, salieron a su paso. He aquí las mejores imágenes.
Los bedmareños residentes en Caparroso han honrado a la Virgen de Cuadros y han acompañado a su patrona por las calles del pueblo. A continuación, tuvo lugar la Eucaristía oficiada por Manuel Fajardo y que contó con la asistencia de la corporación municipal de Caparroso, el alcalde de Bedmar, Enrique Carreras Fresno. La celebración estuvo amenizada por el coro Rociero Senda Ancha. Tras la Eucaristía, se celebró un vermut en la plaza del ayuntamiento y una comida de hermandad en el Iris Pub Monaghan.
San Fermín ha recorrido las calles de Pamplona un año más saludando a sus paisanos. Y al llegar a la Plaza del Consejo se ha producido uno de los "momenticos" más esperados.
No cabía un alfiler desde una hora antes. Nadie quería perderse la jota de Madurga dedicada a San Fermín interpretada como ya es tradición por la Coral de Santiago.
En un respetuosísimo silencio, y a capela han comenzado a resonar las notas: "Glorioso San Fermín, venimos a cantarte mayores y chavales..."
Cientos de personas han acompañado al Santísimo por las calles de Pamplona en la procesión del Corpus Christi tras dos años sin celebrarse. Se han dispuesto tres altares en el recorrido y en la marcha ha participado el arzobispo Francisco Pérez, así como corporativos de la ciudad, como el alcalde Enrique Maya.
Pamplona ha vuelto a vivir la procesión del Santo Entierro, la cita ineludible de Viernes Santo en la Semana Santa pamplonesa después de dos años de suspensiones por la pandemia. Desde la Hermandad de la Pasión, los pasos han recorrido las principales calles del Casco Antiguo con un destacado silencio y rodeados de cientos de fieles.
El buen tiempo y el fin de la mayoría de restricciones ha sacado a la calle a cientos de familias de Pamplona, que han participado en el Domingo de Ramos. Todas las parroquias de Navarra han conmemorado la entrada de Jesús en Jerusalén, aunque la más numerosa ha sido la celebrada en el plaza del Arzobispado. El arzobispo Francisco Pérez ha bendecido las palmas y ramos y la comitiva ha caminado después hasta la catedral, donde se ha celebrado la misa mayor.
Una multitud ha acompañado en Pamplona a la Virgen Dolorosa desde la iglesia de San Lorenzo hasta la Catedral acompañada de los Cofrades de la Hermandad de la Paz y la Caridad que han sido los encargados de portar el paso a través de la calle Mayor, San Saturnino, Plaza Consistorial, Mercaderes y Curia. A pesar de la lluvia, los pamploneses han podido volver a disfrutar de un acto suspendido el año pasado por la pandemia.
El acto de Consagración de Rusia y Ucrania al Corazón Inmaculado de María se ha llevado a cabo este viernes en Pamplona con una procesión que ha partido de la Plaza del Arzobispado y ha culminado en la catedral con un texto que el Papa ha enviado a todos los obispos del mundo con el fin de pedir a Dios por intercesión de la Virgen la paz.
El arzobispo de Pamplona fue uno de los primeros en adherirse a la iniciativa de organizar una celebración unida a los deseos del Papa Francisco, en cuyo transcurso de la misma se ha llevado a cabo una gran colecta en favor de Ucrania.
La Hermandad de la Pasión de Pamplona ha vivido este miércoles de ceniza el primero de sus actos de la Cuaresma con el traslado del Cristo Alzado hasta la Catedral. El acto ha discurrido entre la sede de la Hermandad de la Pasión de la calle Dormitalería y la seo pamplonesa y la imagen ha sido llevada por 20 portadores. Se trata de uno de los primeros actos de Semana Santa de todo el país y el primero en la capital navarra desde 2020. El paso del Cristo Alzado permanecerá en la catedral pamplonesa hasta el día de Viernes Santo para participar en los Vía Crucis que celebra la Hermandad de la Pasión todos los viernes de Cuaresma. La Hermandad de la Pasión ya ha comunicado que retoma todos los actos para esta Semana Santa de 2022.